HACER QUE LA GUERRA FRÍA INCENDIE ESTA VEZ A CUBA

(Premisas y conclusiones para una estrategia correcta-V)

PREMISA 5.- Maduro ha reconocido públicamente lo que venimos diciendo desde hace tiempo: 1) Que Venezuela es un Protectorado de Cuba, el cual gobierna desde La Habana el cubano Raúl Castro, a quien el títere Maduro llama Protector de Venezuela; 2) Que Maduro y su gobierno son títeres de Cuba, por lo cual el Embajador de Cuba se incorpora al Consejo de Ministros para sincerar la subordinación; y, 3) Que en este Protectorado, que tiene la denominación oficial de República Bolivariana de Venezuela para mayor ultraje al Libertador Bolívar, están 25.000 militares cubanos en misión de ocupación disimulada como de colaboración (en verdad, son 40.000 según la cuenta del secretario general de la OEA). En consecuencia, Maduro ha dejado claro lo que la MUD colaboracionista oculta: nuestra lucha no es simplemente por la democracia sino sobretodo por la liberación de Venezuela. Es para liberarnos de Cuba y de su títere Maduro.

Ya he explicado que Cuba ha organizado su fuerza armada de ocupación como una fortaleza inexpugnable defendida por bandas narco-criminales. Por su parte, los colaboracionistas tienen por rol sembrar la cobardía y el derrotismo en el pueblo (si luchamos nos matan, no podemos hacer nada porque no tenemos armas, la salida es pacífica, etc.) Y, por si acaso, en último extremo el anillo de seguridad que rodea a Maduro, realmente un seguro  puesto por Cuba con el pretexto de cuidarlo, pero también puede ejecutarlo si desobedece o traiciona a Cuba. Para facilitar la tarea corrosiva de los colaboracionistas, Cabello viene repitiendo ahora que, en caso de insurgencia, toda la organización criminal al servicio de Cuba vendrá por nosotros, los verdaderos opositores, casa por casa, para ejecutarnos. 

Para derrotar a esta fuerza de ocupación, estructurada como organización criminal, se requiere: 1) organizar la vanguardia de lucha al estilo de la resistencia francesa contra la ocupación alemana de los años 40 o siquiera de la resistencia clandestina venezolana de los años 50, y/o: 2) conseguir ayuda extranjera en armas y entrenamiento y hasta de intervención militar. Ante esta posibilidad Cuba tiene una debilidad intrínseca. Mientras el “paraguas atómico” de la URSS disuadió a las potencias occidentales de intervenir a favor de la rebelión de Hungría (1956) y de la Primavera de Praga (1968), Cuba no cuenta con el mismo poder disuasivo contra una intervención militar extranjera a favor de la liberación de  Venezuela. Para suplir esta deficiencia Cuba tomó, primero, la medida de ordenarle al gobierno títere el retiro de Venezuela del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), con el fin de evitar la tentación de una acción espontánea por iniciativa de un gobierno anti-comunista. Y luego ha decidido repetir su jugada existosa de 1962, cuando la URSS instaló en Cuba misiles con carga atómica. Fue una jugada temeraria que puso al mundo al borde de la guerra atómica, la cual no estalló porque la URSS y EEUU negociaron: retiro de los misiles por la URSS a cambio de que Estados Unidos no interviniera militarmente en Cuba, que fue el objetivo de la jugada. Precisamente con la pretensión de disuadir la intervención extranjera a favor de la liberación de Venezuela es que Cuba ha resucitado la “Guerra Fría”, con la presencia aquí de tropas de Rusia, China e Irán y de los terroristas de Hezbollah, de la FARC y de ELN. Cuba piensa que con este apoyo puede repetir el éxito que tuvo con la jugada temeraria de los misiles en 1962 asegurando, con un acuerdo Estados Unidos-Rusia (su objetivo), el dominio sobre Venezuela y la perpetuación del gobierno comunista títere durante unos 50 años más como ha sucedido en Cuba para desgracia de su pueblo.

CONCLUSIÓN 5.- Frustrar la maniobra de Cuba es tarea prioritaria nuestra para evitar que suframos la misma suerte desgraciada del pueblo cubano. A tal fin, resucitar la Guerra Fría en Venezuela juega a nuestro favor, porque al no haber riesgo de guerra atómica crea las condiciones para la intervención extranjera a dos bandas SIEMPRE QUE LA PROVOQUEMOS: primero para liberación de Venezuela y enseguida, a consecuencia de la misma, para la democratización de Cuba.

Nuestro papel: hacer que la Guerra Fría incendie esta vez a Cuba, a consecuencia del derrumbe de la narcotiranía títere de su Protectorado Venezuela.

petitdacosta@gmail.com                                       23-01-20