martes, 29 de diciembre de 2015

LLENÁNDOSE A DOS MANOS



Del testimonio del Capitán Leamsy Salazar recogido por el periodista español Emili Blasco en el capítulo inicial (BAJAR AL BÚNKER) del libro “BUMERÁN CHÁVEZ” (los fraudes que llevaron al colapso de Venezuela), que debería ser de obligatoria lectura para los 112 diputados de la MUD recién electos y sus suplentes, se llega a estas primeras conclusiones:
1.- Fue el propio Chávez el que pervirtió su gobierno convirtiéndolo en narco-gobierno, más propiamente en narco-tiranía.
2.-  Siguiendo sus instrucciones, varios ministros tuvieron a su cargo el tráfico de drogas y el lavado de dinero.
3.- El pretexto para involucrarse en el narcotráfico ha sido ayudar a las FARC, considerada hoy la mayor traficante de drogas de América.
4.- Al asociarse a las FARC en el negocio ilícito, no sólo han incurrido en este delito, sino en la financiación del terrorismo, ya que para la fecha aquélla era calificada internacionalmente como terrorista.
5.- La identidad ideológica y la solidaridad revolucionaria sólo han servido para encubrir la actividad delictiva de la delincuencia organizada con la ventaja del poder político.
6.- Muerto Chávez siguió el negocio de las drogas por jerarcas de la tiranía. El testigo presenció un despacho por vía marítima en el norte de Paraguaná. Era un embarcadero cerca del Cabo San Román. Significa que en el territorio nacional hay embarcaderos de drogas con destino al extranjero bajo protección oficial.
7.- Después de este embarque llegó a Fuerte Tiuna un camión cargado de maletas llenas de billetes de 100 dólares. Fueron descargadas en una casa, en cuyo interior había una inmensa caja fuerte. Supo del contenido de las maletas porque una de ellas quedó abierta por descuido. “Pero por grande que fuera la caja fuerte, allí no cabía el contenido de todas las maletas recibidas. Además, Salazar recordaba haber visto en al menos otras dos ocasiones la llegada de un camión similar, sin que entonces hubiera imaginado su verdadera carga. ¿Dónde iba el resto del dinero? No tardó en saber la respuesta” (sic).
Hasta aquí lo leído hasta ahora. Sigue la respuesta a la pregunta. Cuenta el testigo que con motivo de una cacería “en una finca que se extiende entre los estados Apure y Barinas” observó algo extraño en el comportamiento de los dos jerarcas que debía escoltar. Quedó intrigado y “cuando ambos desaparecieron, Salazar fue hasta el lugar en que se habían detenido. Iluminando el suelo con su lámpara vio una amplia trampilla. La levantó y descubrió una escalera que bajaba a un espacio subterráneo. Cerca de la entrada encontró un interruptor y lo accionó: ante él había un gran búnker con montañas de fajos de billetes apilados de pared a pared.” Congruente con el contenido de las maletas deberían  ser billetes de 100 dólares.
Continúo la cita: “Salazar contó su hallazgo a un compañero del equipo de seguridad y éste le aseguró que había visto lo mismo en dos búnkeres, igualmente con instalación eléctrica y deshumidificador…Yo vi caletas de billetes, confesó su amigo, impresionado por lo arrecho de los escondrijos y lo atesorado en ellos”.
Desde luego esos búnkeres eran depósitos de tránsito donde el propietario guardaba el dinero mientras conseguía el modo de lavarlo. Era tan descomunal la cantidad que no podía tener salida inmediata, ni tampoco lo podía tener en la ciudad por el riesgo de que lo descubrieran. Todo movimiento grande de dinero en la ciudad provoca sospecha. Y en la ciudad hay muchos mirones y entrépitos.
A las conclusiones anteriores agreguemos entonces:
8.- Los jerarcas del régimen atesoran la más grande riqueza jamás vista en políticos, porque se han enriquecido ilícitamente llenándose a dos manos: por una saqueando la renta petrolera y por la otra traficando con drogas.
Pregunto al lector: ¿qué deben hacer los 112 diputados, cohabitar con la delincuencia organizada convirtiéndose en diputados de la narco-tiranía o enfrentarla como tal hasta hacerla desaparecer?

LA NARCO-TIRANÍA DE LA DELINCUENCIA ORGANIZADA (III) 

domingo, 27 de diciembre de 2015

Después del voto sale calle


La salida a la calle precedió al voto, creando las condiciones subjetivas con el cambio favorable de la opinión mundial, y ahora el voto conduce a la calle para hacer efectivo el mandato imperativo de salir de Maduro
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Los sucesos de 2014 y 2015 han venido a confirmar que la estrategia correcta para liberarnos de Cuba y su gobierno títere (la narco-tiranía de la delincuencia organizada) es alternar y combinar todas las formas de lucha, lo que algunos resumieron en el slogan: voto y calle, calle y voto (Remito a mi columna 123: ACTUAR COMBINANDO TODAS LAS FORMAS DE LUCHA). Efectivamente la lección hasta 2013 fue que sólo el voto no bastaba. Era necesario combinarlo y complementarlo con calle. La gente votó masivamente ganándose la presidencial, pero fue traicionada por la cobardía de quienes no llamaron a la calle rebelándose contra el fraude con el pretexto de que correría sangre. Entonces se perdió el voto porque no se lo combinó con calle. Y para que no se pierda nunca más hay que tener presente en las actuales circunstancias que no hay en la historia de Venezuela un solo precedente de que una tiranía haya entregado pacíficamente el poder. Menos cabe esperarlo ahora de un gobierno títere de la cubana convertido en narco-tiranía de la delincuencia organizada.
La cobardía de 2013 fue un regalo que le hicieron los colaboracionistas al ilegítimo Maduro, tenido entonces por la comunidad internacional como un demócrata. Nadie podía acusarlo de tirano porque era un presidente electo reconocido por los colaboracionistas que usurpaban el rol de la oposición y como tales fueron a las siguientes elecciones regionales. El regalo fue adornado permitiéndole a Maduro que esconda su partida de nacimiento y las de sus padres, así como el acta de defunción de Chávez con el certificado médico, calificados todos de “asuntos irrelevantes” para eximirse de reclamarlos. Así terminó 2013 como un año negro.
Comenzó 2014 dominado por el colaboracionismo. No hacer nada hasta la próxima elección, igualmente fraudulenta. Entonces cuatro políticos (López, Ledezma, Machado y Ceballos) disintieron proclamando que “la salida está en la calle”. A su llamado respondieron miles de jóvenes que participaron en manifestaciones masivas, reprimidas a sangre y fuego por la Guardia Nacional actuando conjuntamente con las bandas paramilitares llamadas colectivos. Su sacrificio no tuvo éxito inmediato en la caída de la tiranía, como tampoco lo tuvieron la insurgencia estudiantil de 1928 contra Gómez ni la huelga universitaria de 1957 contra Pérez Jiménez. Pero, igual que aquéllas, surtieron el efecto de una carga de profundidad. A “LA SALIDA” se le debe el cambio favorable de la opinión pública mundial ante la cual desenmascaró al gobierno títere de Cuba como una tiranía criminal, violadora de los derechos humanos. Creada la imagen, vino la reacción. La prensa internacional, los demócratas del mundo entero encabezados por los expresidentes iberoamericanos (en primera fila Pastrana, Quiroga y González), premios Nobel como Vargas Llosa, organizaciones internacionales como la Unión Europea y ONG como HRW, condenaron a la tiranía. Entonces montaron una vigilancia estrecha que culminó en la reciente elección parlamentaria, en la cual su presencia fue decisiva para impedir un fraude masivo, porque fraude hubo acompañado como siempre de un ventajismo descarado pero no pudieron torcer la votación en la magnitud acostumbrada.
A la prisión ilegal e injusta de López, Ledezma y Ceballos, que ha tenido repercusión mundial; a la movilización de la señora Machado por América, de las señoras López y Ledezma por el mundo y de la señora Ceballos en el país, a la represión brutal contra los jóvenes presos en sitios como La Tumba cuyos gritos han llegado a los oídos del mundo, se debe que la comunidad internacional se convirtiera en un CNE cuidando los votos de los demócratas. Sin LA SALIDA, que creó las condiciones para la vigilancia mundial y la movilización nacional, no hubiera habido este resultado electoral que ha asombrado. Ahora para defenderlo y sobre todo para que se cumpla el mandato imperativo, que es salir de Maduro, habrá que volver a la calle. Aprendida la lección, el pueblo no puede aceptar la reincidencia en la cobardía de 2013. Si la votación fue antecedida por la calle para crear las condiciones favorables, ahora a la votación debe seguirle la calle para salir de Maduro renovando el lema: CALLE Y VOTO, VOTO Y CALLE. No hay espacio para la cobardía, porque la cobardía es colaboracionista.

P.D. Hagamos votos porque 2016 sea el año en que nos liberemos de Cuba, del comunismo y de la narco-tiranía de la delincuencia organizada, que nos ha traído pobreza y corrupción como nunca antes.

Liberación Nacional y No-Reelección (150)

domingo, 20 de diciembre de 2015

Ahora ir "pa´encima"


Dándole al enemigo en su flanco más débil, que es Maduro, el cual no soporta la más elemental investigación por su ilegitimidad de origen
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El 6D hubo un levantamiento cívico contra Maduro y su gobierno títere de Cuba. Fue una rebelión popular usando el arma del voto, de la cual surgió el mandato imperativo dado a los electos de salir de Maduro, primer paso para liberarnos de Cuba, del comunismo y de la narco-tiranía de la delincuencia organizada y así poder comenzar la reconstrucción del país. El pueblo se expresó esta vez mediante el voto, porque lo convencieron de que es posible la salida electoral. Ahora le toca a los electos demostrarlo. Y sólo hay un modo de demostrarlo: sacando a Maduro de la presidencia. Si optan por la cohabitación, habrán traicionado a los electores al incumplir el mandato imperativo que recibieron. Si no sale Maduro, quedará claro que no hay salida electoral. Entonces será otra la salida, no sólo de Maduro, sino de los diputados electos también. La crisis económico-social es de tal magnitud que no admite demora para su solución. Y no habrá solución mientras Maduro siga en la presidencia.
Está visto que Maduro se propone hacer con la Asamblea recién electa lo mismo que hizo Chávez con el Congreso en 1999. Ya le instaló una especie de Constituyente con el Parlamento Comunal, que es el congreso de los colectivos o bandas paramilitares. Ocupa el hemiciclo vacío del Capitolio que correspondía al Senado. Su función: amedrentar a los 112 diputados. Llegado el caso, interferirán el paso y procederán a la agresión verbal y física, que completarán los sujetos de la “esquina caliente” rodeando el edificio. Recordemos a Maduro dirigiendo desde la cúpula del Capitolio el ataque en la calle con cabillas y garrotes contra los diputados de oposición que salían corriendo. Esta vez sólo tendrá que dar la orden en secreto a sus “comuneros” para que adentro le den una “coñacera”, practicando con ellos el “bullying” o acoso parlamentario semejante al escolar que sufren los estudiantes indefensos de sus condiscípulos.
Como medida previa para la defensa de la Asamblea convendría que los electos atiendan el consejo de los expresidentes democráticos y acuerden desde ahora quien la presidirá. Debe ser alguien valiente para que no se repita el bochornoso entreguismo de 1999, cuando el presidente de la Cámara de Diputados, que era Capriles, la entregó a Chávez en lugar de enfrentarlo. En la presente circunstancia la cohabitación sería la forma de entreguismo cobarde al “bullying” parlamentario montado.
La mejor defensa es “ir pa´encima”, comenzando por exigir a Maduro su partida de nacimiento y las de sus padres. El país tiene derecho a saber dónde nació Maduro. Y la Asamblea tiene el deber de comprobar si es venezolano por el lugar de nacimiento (jus soli). El país tiene derecho a saber la nacionalidad de los padres de Maduro. Y la Asamblea tiene el deber de comprobar si tiene otra nacionalidad por su filiación (jus sanguini), que lo inhabilitaría para ejercer el cargo. Es inaceptable que seamos el único país del mundo con un presidente vivo sin partida de nacimiento que además esconde a sus padres.
Al mismo tiempo debe exigírsele a Maduro la presentación del acta de defunción de Chávez para saber dónde, cuándo y de qué murió. ¿Murió en Caracas o en La Habana? Si murió en La Habana, los que simularon la muerte en Caracas, incluyendo a Maduro, están incursos en delito. ¿Murió en diciembre de 2012 o en marzo 2013? Si murió en diciembre, los que simularon su muerte en 2013, incluyendo a Maduro, están incursos en delito. ¿Murió de muerte natural, por mala praxis médica o precipitaron su muerte los cubanos por inconfesable motivación política? En cualquiera de los últimos supuestos, los que simularon el primero, incluyendo a Maduro, están incursos en delito. Agréguese la historia médica para comprobar si Chávez estaba consciente cuando se le atribuyó haber firmado todo cuanto se presentó como firmado por él desde el 8-12-12 hasta marzo 2013. Si no lo estaba, los que simularon lo contrario, incluyendo a Maduro, están incursos en delito. Es inaceptable que seamos el único país del mundo con un presidente muerto sin acta de defunción, lo cual compromete al sucesor por ser el que se benefició de su muerte.
No hacer esta investigación sería repetir el entreguismo de 1999. Peor aún: sería colaboracionismo descarado.

P.D. Mi saludo navideño a todos los presos políticos, comenzando por mi amigo Antonio Ledezma. Los que hemos pasado navidad en la cárcel como presos políticos sabemos cómo se la vive. Y un saludo muy respetuoso a la señora Machado y a las señoras López, Ledezma y Ceballos, porque a ellas se debe haber ganado la opinión pública internacional para la causa democrática. Dios y la Patria las premiará.

Liberación Nacional y No-Reelección (149)

lunes, 14 de diciembre de 2015

EL MANDATO IMPERATIVO: SALIR DE MADURO


El 6D hubo un levantamiento cívico contra Maduro y su régimen, cuya salida es la orden terminante dada por el pueblo a los diputados electos
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Los 112 diputados electos han recibido un mandato. Pero no un mandato representativo que los limitaría a la cohabitación con Maduro, sino un mandato imperativo: salir de Maduro. Los electores no votaron a favor de ellos sino contra Maduro. Dieron una orden indubitable y categórica que ratificaron con la mayoría aplastante para que los mandatarios electos no tengan excusa para incumplirla. No fue una votación cualquiera, sino un “levantamiento cívico” contra Maduro y su régimen. La señora Tintori lo ha entendido correctamente al decir a la prensa extranjera: “No podemos esperar 2019 para echar a Maduro del poder.” Y también la señora Machado: “la renuncia de Maduro es lo que pide el país”.   
La causa del mandato ha sido la promesa de cambio radical y profundo hecha en la campaña por los electos, que sólo puede cumplirse saliendo de Maduro. Si nuestro sistema político fuera parlamentario la misma Asamblea Nacional haría el cambio en enero eligiendo un nuevo presidente. Pero como tenemos un sistema presidencial la Asamblea no elige al presidente pero sí puede forzar su salida para dar cumplimiento al mandato imperativo, ya que con Maduro de presidente es imposible el cambio. La Asamblea no puede resolver la gravísima crisis económico-social que padece el país, porque la política económico-social es atribución del presidente. La Asamblea no puede darnos la seguridad que reclamamos, porque la política de seguridad es atribución del presidente y las fuerzas de seguridad están bajo su mando. La Asamblea no puede disolver y desarmar a las bandas paramilitares que llaman colectivos, porque es atribución del presidente como comandante en jefe de la FAN. La Asamblea no puede acabar con la escasez y la hiperinflación, para que no haya colas, porque, como ya dije, la política económica es atribución del presidente. La Asamblea no puede darnos un adecuado servicio de salud, porque es atribución del presidente. La Asamblea no puede darnos una educación pública de excelencia, porque es atribución del presidente. Y así por consiguiente. Lo peor de todo: la Asamblea no puede acabar con la vergonzosa sumisión a Cuba y expulsar a los agentes cubanos en el gobierno porque es atribución del presidente, por lo cual la Asamblea seguirá siendo órgano de la administración colonial que encabeza el gobierno títere. No siendo soberano el país, tampoco lo ha sido la Asamblea actual ni lo será la recién electa. Es nuestra mayor vergüenza que los diputados ocultan no hablando de ella. Tendremos de nuevo soberanía, recuperando la dignidad nacional, cuando salgamos del gobierno títere encabezado por Maduro. Mientras no lo hagamos, Venezuela seguirá siendo satélite de Cuba, incluyendo a la Asamblea que sería de colaboracionistas. Exactamente: será una asamblea de colaboracionistas sino rompe la atadura colonial con Cuba saliendo de Maduro, su títere.
No sólo es que con Maduro en la presidencia se hace imposible el cambio. Es que además habrue es atribucios tirde controllea podrbio. Algo mo imperativo del cambiovos, porque es atribucios á un conflicto permanente de poderes que impedirá atender los problemas del país y de la gente, con la urgencia que la gravedad demanda. Este conflicto de poderes irá degastando a la Asamblea Nacional. Hay, pues, que actuar desde ahora, exigiéndole a Maduro la renuncia ya. Desde luego, cabe esperar que no lo haga. Entonces, si no renuncia espontáneamente, deberían los diputados anunciar y comprometerse a que, apenas se instale la Asamblea, será designada una comisión parlamentaria encargada de investigar la legitimidad de origen de Maduro: 1) Si cumple con el requisito de la nacionalidad, para lo cual se le obligará a presentar su partida de nacimiento y las de sus padres, para examinarlas a los fines de establecer si es venezolano por nacimiento y no tiene doble nacionalidad; y, 2) El acta de defunción de Chávez con el informe médico para saber cuándo, dónde y de qué murió, a los fines de establecer si está viciada de inconstitucionalidad la sucesión presidencial de 2013. Esto no puede dejar de hacerse porque sería una traición a los electores. Los diputados no tienen excusa para abstenerse de exigirle la prueba de su legitimidad de origen. Es su deber constitucional.
Salir de Maduro es la prioridad absoluta de los diputados en cumplimiento del mandato imperativo. O sale Maduro o terminarán repudiados por el pueblo que los eligió.
LIBERACIÓN Y NO-REELECCIÓN (148)