Algunos compañeros de
lucha, de mi mayor estimación, habían propuesto hace algún tiempo la
convocatoria de una Constituyente como salida de la situación que padecemos. Creí
haberlos convencido de que sería un error funesto. Supongo que no son ellos,
sino infiltrados de la tiranía comunista o colaboracionistas, que son lo mismo,
los que le están metiendo en la cabeza a los estudiantes esta locura. Una
locura suicida que debemos detener ya. Veamos porqué.
En Venezuela sólo se
debe convocar una Constituyente cuando se ha tomado el poder. Antes no. En la
historia contemporánea no existe antecedente de que una Constituyente derroque
al gobierno de turno. Primero se toma el poder y después se convoca la
Constituyente para que redacte una Constitución que legitime el nuevo régimen y
establezca el nuevo sistema político-jurídico, tal como lo conciben los que han
tomado el poder. Siempre ha sido así, y no hay posibilidad de que no sea así.
Ningún gobierno va a permitir que se le convoque una Constituyente para
derrocarlo. Ninguna oligarquía va a permitir que se le convoque una
Constituyente para desplazarla y hasta enjuiciarla. Si ningún gobierno y
ninguna oligarquía lo han permitido, mucho menos lo permitirá Cuba que tiene
garantizada su supervivencia con el mantenimiento del gobierno títere. Mucho
menos lo permitirá una tiranía comunista, porque es propio de los comunistas
perpetuarse en el poder para siempre, lo que confiesan con el mayor descaro:
“la revolución vino para quedarse.” Mucho menos permitirá la boliburguesía comunista que saquea la Nación.
Para sostener lo que
digo me basta recordar el antecedente de las tres últimas constituyentes. En
1.945 Acción Democrática, junto con los militares, derrocó al gobierno
constitucional de Medina Angarita. Y fue ya en el poder cuando convocó la
Constituyente para hacer una Constitución a su medida. El 75% de los diputados
electos eran adecos. En 1.948 fue derrocada AD por los militares, quienes
cuatro años después (1.952), cuando se sintieron seguros en el poder,
convocaron una Constituyente para hacer una Constitución a su medida. Confiados
en el favor popular, garantizaron unas elecciones limpias por lo cual ganó la
oposición. No aceptaron los militares una Constituyente que los destituiría y
los enjuiciaría. Entonces desconocieron el resultado electoral y procedieron a
un fraude descarado. Se instaló la Constituyente con el 100% de los diputados
del gobierno. Sin representante de la oposición. Y esa Constituyente cumplió
con el objeto de su convocatoria: legitimar la dictadura militar y consagrar la
reelección indefinida del dictador.
Cuando la democracia
entró en crisis algunos, entre ellos yo, propusimos convocar una Constituyente
que la salvara modificando sus estructuras caducas. En 1997, cuando renuncié a
la Procuraduría General de la República, hice un llamado a tomar conciencia de
que la democracia iba camino al colapso y que su única salvación era una
Constituyente que atendiera al clamor popular de un cambio radical y profundo.
Ni el gobierno (presumo que el presidente temió que lo destituyeran) ni los
partidos (que no aceptaban ser desplazados de un poder que habían tenido 40
años) me hicieron caso. Les hice una advertencia: si no hay una Constituyente
para salvar a la democracia, vendrá una Constituyente para establecer la
tiranía. Desatendieron mi advertencia creyéndose omnipotentes y sucedió lo
previsto: llegó Chávez y convocó una Constituyente para aprobar la Constitución
que él mismo hizo, haciendo elegir con trampa (el kino) una asamblea que tuvo
el 90% de diputados del gobierno. Fíjense: en ningún momento Chávez me
apoyó en mi propuesta de convocar la Constituyente en 1.998. El estuvo claro
que una Constituyente se convoca con el poder en las manos para hacer una
Constitución a la medida. Antes no. Intuía que si era convocada la
Constituyente antes de que llegara al poder se trastornaría su plan, ya que los
actores políticos habrían sido otros.
Estos antecedentes enseñan
que la Constituyente no es la vía para tomar el poder, sino para consolidarse
en el poder después de tomado. Primero hay que tomar el poder y después
convocar la Constituyente.
Así, pues, jóvenes:
no caigan en la trampa de la Constituyente porque sería el suicidio político de
ustedes. Y la mayor desgracia para todos.
REFLEXIONES 51 12-05-14
Un saludo para el Dr. Petit Da Costa. Ciertamente una constituyente bajo este regimen (y especialmente este CNE) es SUICIDIO, pudiera ser aprovechada para radicalizar el proyecto rojo, constitucionalizando lo que buscan implantar de hecho, la nueva "carta magna" sería un virtual "copy/paste" de la constitución de Cuba... y "adiós luz que te apagaste"...
ResponderEliminarMuchos políticos venezolanos de ambos bandos, están anclados o son reos del entorno y conceptos de polarización creados por el consejo malsano de quienes les interesa tenernos divididos, para aprovecharse de esa situación.
ResponderEliminarUna reconfiguración nacional, no polarizada les parece imposible, o inaceptable. Mientras que de lo que se trata y aquí planteamos, es de un nuevo bloque nacional que este íntimamente ligado al reencuentro y la reconstrucción nacional.
Difícil y riesgosa diferenciación, necesaria hacerla al manejo actual.
Lo deseable, es que una ineludible, cercana y obligatoria próxima discusión, de un mejor país, sea la imperiosa expresión de la participación popular y un verdadero ejercicio de renovación, paz y reencuentro, indisolublemente ligada a un proyecto país que nos permita avanzar a la modernidad y al mismo tiempo al reencuentro como hermanos.
Esta discusión, debe ser a través de una Asamblea de todos, representativa de la nación como un todo, y no de fracciones particulares de ella.
Normalmente latente, la constituyente, se hace manifiesto cuando las circunstancias políticas RECLAMAN SU EMERGENCIA, como es el caso que vivimos hoy en Venezuela con una gobernanza con índices deplorables.
Luis “Balo” Farías
Así como los constituyentitas y repúblicos de 1811, 1864 y de 1946, en tiempos y momentos trascendentales en la vida del país, lograron diseñar textos constitucionales que en su momento fueron novísimos y pudimos rebasar situaciones que parecían imposible de lograr, elaborando constituciones que en sus distintas épocas fueron capaces de reencauzar la vida nacional hacia caminos de mayor prosperidad y paz nacional, nuestra responsabilidad, hoy, es de proporciones históricas en esta época aciaga que vive la república, pues tenemos la enorme responsabilidad de buscar también, las vías y causes para retomar, el camino hacia una Venezuela más humanista, mas civilista, mas prospera, reconciliada y democrática
ResponderEliminarLas experiencias históricas han demostrado que han existido diversas maneras de lograrlo:
1) Por negociación de las fuerzas políticas que interactúan en la vida política
2) Invocar y convocar la asamblea nacional constituyente que nunca hemos tenido
1) Por negociación de todas las fuerzas políticas que interactúan en la vida política actual que comprendan la causa y solución de la crisis y se pongan de acuerdo en el Parlamento Nacional y designen de su seno o de fuera una Comisión que redacte una nueva Constitución.
Ocurrió en España: Gracias al Estado Federal Centralizado (EFC) quedó enferma y devastada después de la Guerra Civil Pero los líderes interpretaron y resolvieron adecuadamente la enfermedad: … Decidieron refundar a España, redactar una nueva Constitución
Con el nuevo EFDescentralizado España en 20 años sanó de su enfermedad y de sus secuelas. Actualmente acaba de salir de una depresión económica no imputable al modelo de EFD sino responsabilidad de gobernantes ineptos que apelaron al populismo y endeudaron al país para comprar votos y prevaricar -
Ocurrió en Alemania: Gracias al EFCentralizado quedó enferma y dividida devastada a la muerte de Hitler. Los líderes interpretaron y resolvieron adecuadamente la enfermedad: decidieron redactar una nueva Constitución (Ley Fundamental). El 8 de mayo de 1949 aprobó la Ley Fundamental y se instauró un nuevo EFDescentralizado, Alemania del oeste sanó su enfermedad y prosperó como bien sabemos.
Ocurrió en Japón: Gracias al EFCentralizado quedó enfermo, derrotado y destruido después de la II Guerra Mundial. Los líderes victoriosos interpretaron y resolvieron encomendarle a un equipo de veinte estadounidenses la redacción de una nueva Constitución que reemplazó el Centralismo de la monarquía absoluta por un EFDescentralizado de una monarquía parlamentaria. Y ya sabemos cómo sanó y prosperó Japón.
Ocurrió en Corea: Gracias al EFCentralizado quedó enferma y dividida después de la II Guerra mundial, hasta que los líderes interpretaron y resolvieron adecuadamente la enfermedad: decidieron redactar en 1987 una nueva Constitución para refundar Corea del sur que sustituyó el Centralismo por un EFDescentralizado.
Ocurrió en Singapur, Australia. Nueva Zelanda, Taiwán, Hong Kong; Barbados, donde no hubo Asamblea Nacional Constituyente, pero si una nueva Constitución con EFDescentralizados gracias al entendimiento de los líderes de todas las toldas ideológicas
Pero si frente a las patologías socio políticas presentes en el país actualmente no hay entendimiento para enfrentarlas entre los diferentes líderes y fuerzas políticas actuantes (caso venezolano que nos ocupa) no queda otro recurso fundacional que:
2) Invocar y convocar la Asamblea nacional Constituyente que nunca hemos tenido
Fue el caso de Italia una vez concluida la II Guerra Mundial: Gracias al Centralismo quedó enferma, devastada y destruida después de Mussolini. Los líderes políticos decidieron refundar una nueva Italia mediante una nueva Constitución redactada por una Asamblea Constituyente que sustituyó el Centralismo por un nuevo modelo de EFDescentralizado con el cual Italia superó y sanó de su enfermedad y supero sus secuelas de destrucción y volvió a ser próspera.
Un alzamiento popular del pueblo venezolano a nivel nacional, excluyendo los delincuentes de las FAN que andan en pantaletas castristas y a los MUDos enchufados, con la sociedad civil guiada a si misma con nuestros estudiantes, padres y madres de familia, profesionales, obreros e iglesias es la única salida viable para remover al asesino Nicolás Maduro y sus criminales esbirros enquistados en Miraflores y demás instituciones del fallido estado democrático de Venezuela y rescatar nuestra nación.
ResponderEliminarAl momento del alzamiento y rescate de Venezuela tenemos que liberar a Leopoldo López, al comisario Ivan Simonovis y a todos los presos políticos del terrorista régimen de usurpación Castro chavista.
Luego e inmediatamente establecer una junta de gobierno provisional y convocar un poder constituyente que decida por vía democrática el destino de nuestro pueblo.
Los delincuentes del criminal régimen vejatorio de nuestro país, deberán ser juzgados conforme las leyes restablecidas y las nuevas que surjan del poder constituido.
Hay que luchar por rescatar Venezuela.
Dios Vida Patria Libertad.
Saludos,
Dr. Hugo A. Urribarri